Cristo ha vencido a la muerte. En esta noche gloriosa, hemos podido ver su luz y sentir su calor en la celebración comunitaria de la Vigilia Pascual.
Os dejamos algunas fotos de anoche para que no olvidéis que Dios sigue vivo y actuando en nuestras familias: Animándonos a amarnos unos a otros, ayudándonos a criar a nuestros hijos, a guiar pacientemente a nuestros adolescentes, a cuidar de nuestros mayores, a afrontar las mil y una vicisitudes que la vida nos ofrece cada día.
¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!
"También vosotros estáis tristes ahora, pero volveré a veros y
se alegrará vuestro corazón y vuestra alegría nadie os la podrá
quitar” (Jn 16.23)
Oh Dios, que por medio de tu Hijo
nos has dado el fuego de tu luz: Santifica + este fuego y enciende en nosotros el deseo de ser LUZ y ESPERANZA en el MUNDO para que,
solidarios con los demás hombres,
podamos encontrarnos contigo siempre.
En las tinieblas apareció la luz. Es la luz de Cristo Resucitado, que está aquí, que nos mira con amor infinito. Su luz nos llena de alegría y de sentido.
Exulten por fin los
coros de los ángeles,
exulten las jerarquías del cielo,
y por la victoria de Rey tan poderoso
que las trompetas anuncien la salvación.
exulten las jerarquías del cielo,
y por la victoria de Rey tan poderoso
que las trompetas anuncien la salvación.
Gracias, Óscar, por ir adentrándonos en la celebración con tus inocentes preguntas: ¿Qué sucede?, ¿por qué estáis tan contentos?, ¿por qué esta noche es tan especial?
Vamos a ser testigos de la historia de amor que vive Dios con nosotros los hombres. Nos ama tan intensamente que nos crea a su imagen y semejanza, y nos regala un hogar para vivir: el mundo. En el mundo pondrá su tienda el Hijo, y aparecerá la bondad y la misericordia de Dios.
Que tu misericordia me
envuelva
como atmósfera de mi
espíritu.
Que yo me bañe en tu
misericordia.
Que de ella me alimente
cada día
y me cure de mis
heridas.
Por tu misericordia me
levanto de mis caídas,
por tu misericordia
confío, no temo,
y me siento en paz y
gozo grande,
y lo espero todo por tu
misericordia.
De tu misericordia está
llena la tierra,
de tu misericordia está
necesitado el ser humano,
de tu misericordia
quiero revestirme,
sea mi traje de gala,
saciarme quiero de tu
misericordia.
"Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él, sabiendo que Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no muere más, y que la muerte no tiene ya señorío sobre él." (Rm 6, 8-9)
¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí. HA RESUCITADO. (Lc 24, 1-12)
Renovación de las promesas bautismales:
Purifica
mi ser Señor sánalo con tu amor, siento tus manos compasivas
tocando mi fragilidad ¿cómo podré nacer de nuevo? me envuelves con
tu presencia sanadora y algo nuevo renace en mí, lávame con las
aguas del perdón y la gracia y hazme más humana porque solo Contigo
puedo renacer a una vida nueva.
Preparando la mesa para la liturgia eucarística.
Me siento feliz, estoy contento como vosotros.
Si Jesús está vivo, vamos a cantar.
De la misa a la mesa. La comunidad está gozosa y celebra la vida nueva que Jesús hace brotar en nosotros. Unos refrescos, cava para brindar y unas pastas. Y la alegría de sentirnos hermanos, hijos de un Dios que nos quiere con locura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario